Descripción de Razas

Nos encontramos ante una raza inmortal. Ante la luz del sol su piel brilla como si de diamantes se tratase. Mientras que el propio fuego contra su piel les mata, la decapitación o desmembramientos los retiene hasta que su cuerpo vuelve a unirse por si solo. Su piel es prácticamente impenetrable por cualquier arma humana, tan solo por otro vampiro. Poseen colmillos y se alimentan se sangre, algunos de humana mientras que otros han decidido dejar dicho hábito y alimentarse de animales. Sus ojos poseen un color diferente dependiendo de su dieta, quienes se alimentan de sangre humana los tienen rojos y aquellos que prefieren la dieta animal los tienen de color miel. Aun así cuando tienen hambre los de ambos son rojos. Para su conversión un humano debe ser mordido por un vampiro y que su ponzoña actué sobre este, a veces el humano no sobrevive. Si sobrevive pasará entre dos o tres días sin poder moverse hasta que termine la transición. Se quedan paralizados con la edad y apariencia que tenían a la edad que fueron convertidos. Algunos de estos poseen un don especial, algo que en su vida humana tenían como característica especial, otros simplemente no lo tienen. Suelen reunirse en aquelarres. Los hombres son fértiles, las mujeres no.

Son una raza inmortal. Ante la luz del sol su piel se quema, salvo en unos pocos, los cuales poseen unos anillos que les protegen del sol. Mientras que el propio fuego contra su piel les mata, además de una daga en el corazón. La decapitación o desmembración los retiene hasta que su cuerpo vuelve a unirse por si solo, también las estacas en cualquier parte de su cuerpo pueden retenerlos y la verbena, la cual es venenosa para ellos. Su cuerpo se regenera con facilidad de cualquier herida causada. Poseen colmillos y se alimentan se sangre, algunos de humana mientras que otros han decidido dejar dicho hábito y alimentarse de animales. Sus ojos poseen un color similar al que tenían en su vida humana. Para su conversión un humano debe tomar sangre de vampiro, asesinado con la sangre del vampiro en sus venas y alimentarse de sangre antes de que finalice la transición, de no ser así morirá. Se quedan paralizados con la edad y apariencia que tenían a la edad que fueron convertidos. Existe una clase de vampiros, los originales, los cuales tan solo pueden ser mantenidos en reposo con una daga de plata impregnada en ceniza de un roble blanco atravesando su corazón, una vez fuera esta serán volverán a la vida. El único modo de matarlos es mediante una daga de ese árbol atravesando su corazón. No son fértiles.

Son una roza inmortal. No pueden salir a la luz del sol porque este les quema, de modo que deben vivir por la noche. Duermen en ataúdes para que la luz del sol no les toque mientras duermen. También les mata el fuego. Las dagas en el corazón son simples cuentos chinos, ya que su piel es impenetrable por un humano. Son capaces de leer las mentes de otros, siempre y cuando no sean sus "hijos" es decir, no pueden leer la mente de quienes han transformado, ya que se bloquea. El ajenjo es venenoso para ellos. Además no pueden tomar sangre de alguien que este muerto, de modo que deben dejar de beber antes de que su corazón deje de latir. Se alimentan de sangre, tanto humana como animal, según hayan decidido o según el lugar en el que habitan se lo permita. Si se mantienen sin alimentarse durante un tiempo su piel se tersa demasiado y toman un aspecto demacrado, lo cual cambia inmediatamente si vuelven a alimentarse. Para ser convertido en vampiro un humano este debe ser mordido y su sangre bebida hasta que no queda prácticamente sangre en tu interior, darle entonces su propia sangre y dejar que tu cuerpo se valla muriendo poco a poco. No son fértiles. No cambian físicamente [el cabello al ser cortado crece de inmediato].

Capacidad física aumentada. Son más fuertes en sus garras y dientes, que en sus extremidades. Resistencia aumentada tanto en su forma humana como en su forma animal, pudiendo resistir el golpe de un humano, por fuerte que sea, y sentirlo como una caricia. Pueden curarse más rápido de lo normal de una herida. Transformación en un animal. Este animal será siempre de un tamaño muy superior a la media del resto de la especie. Características propias del animal en que se convierten. En el caso de los "lobos" de La Push, poseen un cuerpo sigiloso y unos sentidos desarrollados. Telepatía en forma animal que les da la capacidad de leer la mente de sus compañeros y compartir pensamientos. Pueden generar el suficiente calor para alterar la temperatura del ambiente, aunque no son conscientes de eso. La ponzoña de los vampiros es terriblemente letal para ellos. Deben controlar su genio y sus emociones, sino se convertirán rápidamente. Desprenden un olor desagradable a animal; sólo perceptible para vampiros.
Son capaces de amar como cualquier humano, pero como los animales, encuentran a su pareja reproductora cuando llega el momento. En dicho momento se produce la imprimación, según la cual ambos miembros de la pareja se enamoran pérdidamente el uno del otro, un amor irrompible e imparable. Si el imprimado o la imprimada no es de la misma edad o cercana, el amor es fraterno, materno o paternofilial hasta que el miembro humano crece. En su forma animal, suelen ser de un tamaño superior al animal medio. No envejecen siempre y cuando se transformen de forma continuada. Están organizados en manadas y otros tipos de grupos animales. Por ejemplo, unos metamorfos que se transformen en aves, se organizarían en bandadas. Son medianamente humanos, por lo tanto, necesitan dormir. El poder del metamorfo es hereditario. Si se desciende de un metamorfo se despertará. Pero el metamorfo necesita de un catalizador, un enemigo que provoque la necesidad del animal de salir. Por ejemplo, la presencia de vampiros en la zona o de licántropos. Al ser humanos en esencia, se alimentan de comida normal. Pero en forma animal, se pueden dejar llevar por sus instintos comiendo lo que el animal le pide.
Recién despiertos: Son incapaces de controlar sus emociones y por tanto la transformación. La transformación es dolorosa, pues el cuerpo necesita "autodestruirse", "explotar". Antes de transformarse comienzan una serie de convulsiones.

Fuerza física aumentada. Capacidad para viajar a gran velocidad. Piel muy resistente a los golpes, excepto los infligidos por su propia especie o por una rival. Olfato y visión desarrollados. Transformación en medio-lobo. En dicha forma, poseen un cuerpo más ágil y ligero, con un pelaje sedoso. Sus colmillos en esta forma son muy resistentes y punzantes. Segregación de veneno: Pueden segregar un tipo de veneno especial que causa la transformación en licántropo. Este se expulsa através de los colmillos durante el mordisco. El veneno actúa como el de una serpiente: paraliza a su víctima y facilita su consumición. Pueden sanar las heridas después de un sueño reparador. Pueden producir un gran rugido o aullido capaz de producir mareos y daños sobre estructuras sólidas.
Debilidades: La plata les produce severos y profundos daños. La verbena les paraliza. La ponzoña de los vampiros resulta letal. Los puntos fuertes de los metamorfos, por ejemplo, los colmillos de los de La Push; pueden desgarrar y desmembrar con facilidad a un licántropo. Quemar sus restos es una forma definitiva de destruirlos. Cortarles la cabeza es una forma definitiva de destruirlos.
Son seres humanos en apariencia, pero pueden transformarse en un "híbrido" humano-lobo.
Bajo el aspecto semi-humano, su altura aumenta, su cuerpo se envuelve de un pelaje sedoso y sus extremidades se transforman a las de un lobo. No pierden la erección de su figura. Caminan a dos "patas" en dicha forma. Poseen unos ojos oscuros y sanguinolentos. Tienen un aspecto aterrador. Al igual que los vampiros, pueden ser "vegetarianos" o "saanguinarios". Lo que significa que se pueden alimentar sólo de carne animal o sólo de carne humana.
Su alimentación consiste únicamente en la consumición de carne cruda. Si comen carne animal, sus ojos en su forma humana tienen un tono verdoso. Si, en cambio, se guían por sus instintos y consumen carne humana, sus ojos estarán en el espectro cálido del color: rojos, amarillos, naranjas... Sus poderes NO dependen de la luna pues esta SIEMPRE está llena. Ya sea de día o de noche, la Luna está presente y por tanto, pueden convertirse en cualquier momento. Pero su resistencia es mayor cuando es de noche, porque influye más en sus cuerpos. Su transformación depende de su estado de ánimo. Al igual que los metamorfos, la ira es un canalizante importante.
Conversión: La emisión del veneno en una herida, hace que un humano se convierta. Para que la conversión se cumpla, el veneno debe extender por el cuerpo con la persona aún viva y morir cuando esté completada la distribución. El hijo de un licántropo también lo heredará.
Se trata de los licántropos recién convertidos.
Se transforman únicamente en la noche.
No pueden controlar su transformación, es decir, no pueden desear transformarse, sólo se transforman si la luna les hace mella o si se enfadan.

La verbena les marea cuando está en su sistema. El poder de los conjuros depende de dicha característica. Aunque pueden ser tanto hombres como mujeres, es más normal que la mujer posea los poderes, pues son más responsables con estos.La sangre de un vampiro, tomada repetidas veces, puede convertir a un humano en brujo, el resultado de la conversión es idéntico al resultado de la conversión en vampiro, se realiza un vínculo de lealtad y servidumbre. La condición debe ser heredada. Es decir, el hijo o la hija de un brujo o bruja puede heredar sus poderes y por lo tanto, nacer brujo. Los descendientes de un brujo sienten una lealtad irrompible hacia la criatura que convirtió al primer ancestro brujo.
Practicante (brujos que despiertan sus poderes o humanos que practican magia leve)
No poseen ningún poder propio de las brujas, a excepción de la pirogénesis y la levitación.
Necesitan de una bruja o brujo que les enseñe a la magia para convertirse del todo. Sus habilidades mágicas empiezan a aparecer comúnmente a los 15 o 16 años, llevándoles mas de una década llegar a dominarlos. Usan libros transmitidos de generación en generación para realizar los conjuros/hechizos. Difícilmente son detectados como brujo/a por alguien a menos de que estos revelen su naturaleza mágica.

Capacidad física aumentada. Son menos fuertes que lo vampiros, pero más fuertes que un humano normal. Pueden absorber la energía vital [obviamente no pueden tomar esta energía de un vampiro] de cualquier ser mediante el contacto. Con ello debilitan a la persona o les producen daño si el contacto es prolongado. Su conversor es inmune. Son capaces de ver en la oscuridad, ver a grandes distancias y hacer "zoom". Capacidad para cambiar su aspecto y transformarse en un objeto o persona, pero no en un animal ni adquiriendo las habilidades de quienes se tranforman. Capacidad para curar rápido las heridas. Capacidad para levitar o hacer que los objetos floten. Cualquier debilidad humana. Si no se alimentan de energía vital, pueden convertirse en estatuas de hielo. Tienen los ojos verdes o azules muy intenso cuando usan sus poderes. Huelen muy bien para los humanos y vampiros, pero para el resto de razas huelen a azufre. En el terreno alimenticio son como los humanos, pero se alimentan de energía vital. Si pasan tiempo sin absorber la energía vital de un ser, su piel se va volviendo fría hasta que se convierten en estatuas de hielo.
Cuando tocan a alguien, estos sienten una leve descarga, como un pequeño calambre. En realidad están absorbiéndole energía vital. Cuando abusan de la magia sus cabellos y ojos cambian. Si abusan de la magia negra, sus iris se vuelven negros y su pelo se oscurece al extremo, además de que las arterias de la cara se hacen visibles con una tonalidad negra. Cuando abusan de la magia blanca, sus ojos pierden la pupila y el iris y el pelo se les vuelve completamente blanco. Pueden hacer conjuros. El poder de los conjuros depende de dicha característica. Aunque pueden ser tanto hombres como mujeres, es más normal que la mujer posea los poderes, pues son más responsables con estos. La condición debe ser heredada. Es decir, el hijo o la hija de un brujo o bruja puede heredar sus poderes y por lo tanto, nacer brujo. Los descendientes de un brujo sienten una lealtad irrompible hacia la criatura que convirtió al primer ancestro brujo. Cualquier ser sobrenatural puede identificarles como brujo/as.